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¿Cómo empezaste con la fotografía?
Estudié ciencias de la comunicación y mercadotecnia. En la carrera había clases de fotografía y me comenzó a interesar. Antes de dedicarme al arte trabajé en televisión, relaciones públicas y mercadotecnia en diversas empresas; mientras tanto practicaba la fotografía de forma amateur. Aún no me veía como artista. En México, en ese momento no era valorada la fotografía de autor. A mediados de los ochentas la foto de autor en nuestro país no tenía un mercado importante. Las galerias de arte practicamente no la exhibían a pesár de que había artistas como Manuel Alvarez Bravo y Graciela Iturbide. La foto de paisaje era todavía mucho menos apreciada. Ser artista, fotógrafo y además vivir en el interior de la república era un camino casi imposible para ser tomado en cuenta. Soy de Saltillo, Coahuila. Si en esta época es difícil que los especialistas se fijen en artistas del interior de la república antes era muy complicado.
¿Qué o quién te inspiró para realizar tu obra?
En el mundo del arte me inspiraba la pintura. Yo no era pintor ni estudié para serlo pero mi familia en algún punto tuvo una galeria y eso me acercó al arte. Me interesaba el movimiento del expresionamismo abstracto americano; artistas como Robert Rauschenberg y Jasper Johns, entre otros, fueron una inspiración; no había interés de copiar, sino de motivarme, inspirarme. Me considero un artista y un fotógrafo autodidacta porque nunca fui a una escuela de arte. Me formé empíricamente. Iba mucho al cine, veía y leía sobre arte, todavía lo hago. Me relacioné con muchos pintores y artistas, y enriquecí mi visión. La herramienta que se me facilitaba era la fotografía porque tenía conocimientos previos y también porque había estado en televisión. Lo que me tomó más tiempo fue darle una característica o lenguaje especial a mi obra.
¿Por qué escogiste los desiertos?
Buscaba un espacio para contar historias. Lo que me interesaba era reflexionar sobre el entorno; me interesaban las condiciones de aridez extrema y escogía un lugar en donde pudiera hacer mi intervención. Siempre me llamó la atención el paisaje. Soy de Coahuila. El desierto es un lugar que desde niño me ha en-
cantado, lo caminaba mucho. La mayoria de los fotógrafos empieza con la figura humana o con foto documental. A mí nunca me interesó. En el intento de descubrir mi lenguaje me enfoqué en el desierto. Fue un camino muy complicado. Primero hice paisajes sin presencia humana. Me acuerdo que Luna Cornea, una revista especializada en fotografía, hizo un especial sobre paisaje y no tomaron en cuenta mi obra a pesar de que tenía dos series publicadas y mi obra ya tenía un lenguaje definido. Aposte y creí en algo que estaba seguro que tarde o temprano me daría un lugar.
¿Cuánto tiempo te toma hacer una serie de fotos?
Me toma mucho tiempo hacer una serie, varios años. Ahora estoy trabajando en mi quinta serie. Se llama Tormenta de Luz y la inicié en el año 2008. En las otras me tarde alrededor de 3 a 4 años en terminarlas. Estas primeras series en blanco y negro eran más complejas porque manipulaba el negativo y la impre- sión, los rompía y en algunas ocasiones hasta los quemaba y ya no podía hacer una serie igual.
¿En este camino tan difícil qué fue lo que te llevó a continuar?
Gracias a este primer trabajo que te comenté, me gané una beca llamada Jovenes Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes. Practicamente todos los que fueron mis compañeros de becarios se quedaron en el camino. Algunos están relacionados con la fotografía pero no como artistas. Yo soy muy disciplinado y necio en lo que quiero. Lo tuve y siguiendo teniendo muy claro. Siempre aposte que tarde o temprano algo iba a pasar con mi obra. Creo en mi trabajo, supe moverme y mostrarlo mucho. En ese momento desarrollaba fotografía comercial para conse- guir ingresos que me permitieran construir mi camino como artista.
¿Ahora ya vives del arte?
Ya tengo varios años que me dedico afortunadamente a vivir de mi obra. A pesar de que ya es bastante más aceptado el mundo de la fotografia no muchos logran vivir de la fotografía de autor. En realidad, me considero un artista visual. Mi obra contiene elementos de otras disciplinas: utilizo el video, la escultura, la instalación y obviamente la fotografía.
¿En qué desierto estas trabajando actualmente?
Desde el 2008 estoy haciendo esta serie que se llama Tormenta de Luz que no sólo es en México sino en 13 desiertos alrededor mundo como por ejemplo: el Sahara, Namib, el Gobi en Mongolia, en el desierto de Atacama en Chile, en la Puna que es en el norte de Argentina y en Islandia que aunque no es un desierto es una zona árida donde hay volcanes, ceniza, rocas y glaciares. Me voy pronto a Australia a visitar desiertos y luego voy a ir a la India, al sur de Estados Unidos y posiblemente ire a Bolivia. Dejé de trabajar estos años en los desiertos mexicanos porque me concentré más en los extranjeros. Pero a partir de este año regreso a trabajar en ellos.
¿Estás desarrollando otro tipo de proyectos?
Estoy haciendo una película referente a los desiertos y a las personas que viven en ellos. Es como un road movie de mi trabajo como fotógrafo y artista visual. Esta dirigida por Everardo González, un gran documentalista mexicano. En el largometraje, mi trabajo en el desierto es el el hilo conductor para contar historias de las culturas que habitan en estos lugares tan lejanos y extremos del planeta. También contaremos las historias de las personas ligadas a mi obra, ya que algunos de ellos fueron mis guías, me dieron hospedaje o me ayudaron a realizar una fotografía. La pelicula estará lista en aproximadamente en un año y medio.
¿Qué le recomendarias a una persona que quiere construirse como artista?
Primero tiene que estar seguro de que quiere ser artista. Ahora ya hay más escuelas y academias de arte, carreras de artes visuales y fotografía que no existían cuando yo comenzaba mi carrera. También hay más maestrías. Aunque también es para- dójico; ya hay más información pero por lo mismo es más difícil convertirse en un artista. A través de internet te enteras de lo que hace alguien en Japón y Corea en tiempo real. Descubrir el hilo negro – si de por si uno reinventa el hilo negro no lo descubre– , ahora crear un lenguaje propio es más complejo. A lo mejor hace 30 años hacías algo y podía ser muy original en México pero viajando descubrías algo parecido en otro país. Ahora te enteras de una cantidad impresionante y abrumadora de artistas. La otra recomendación es que los jovenes que quieran construir una carrera tienen que empaparse de cultura general. Tienen que leer mucho, ver cine no comercial, observar todo tipo de manifestaciones artísticas. Esta es la mejor manera de enriquecer tu lenguaje.
¿Dónde has expuesto y qué proximas exposiciones tienes?
Llevo 20 años de carrera y he expuesto en distintas ciudades alrededor de los cinco continentes: Beijing, París, Madrid, Barcelona, Nueva York, San Francisco, Bue- nos Aires, Houston, Miami, Sao Paulo, Monterrey, Napoles, Bogotá, Londres, La Habana, Lima, El Cairo… Tengo alrededor de 90 exposiciones. Voy a participar en julio en una exposición colectiva internacional en el museo MARCO en Monterrey. El próximo año expondré en Santiago de Chile en el Museo de Bellas Artes, entre otras exposiciones.
www.misdesiertos.com
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