Las formas de esparcimiento cambian con el tiempo, al igual que los destinos y lugares a los que la gente asiste. Uno de estos cambios es en favor del planeta y la ecología, es un cambio sustentable.
El turismo sustentable busca llegar al equilibrio entre las actividades económicas humanas y el medio ambiente. Esta nueva percepción repercute en la economía local del sitio anfitrión, teniendo como resultado una mejora en la calidad de vida de las comunidades implicadas.
Una labor incluyente es lo que propone el turismo sostenible, debido a que no solo toma en cuenta la ubicación del complejo turístico, sino que busca preservar los recursos naturales y culturales del lugar, ya que estos son parte del desarrollo social y del crecimiento económico.
México, siempre lleno de belleza, ofrece diferentes atractivos naturales que lo hacen un sitio idóneo para el turismo, la integración y respeto de la flora y fauna. Por ello no es de sorprenderse que estados como Quintana Roo y Yucatán se unan a esta lucha por un turismo más amigable y respetuoso con el planeta.
Como muestra del compromiso a favor del medio ambiente, en el corazón de la península de Yucatán existe un proyecto llamado Haciendas en el Mundo Maya, que busca crear un vínculo entre el pasado y el futuro Maya mediante la restauración de haciendas henequeneras para uso hotelero; se ayuda a las comunidades locales, ya que posteriormente estas trabajan directamente con el hotel en diferentes actividades de protección al ambiente y a la difusión de la cultura Maya.
Otra prueba de turismo sustentable en Yucatán es Pac-Chen (pozo inclinado), comunidad cercana a las ruinas de Coba que une perfectamente sus raíces mayas con el moderno ecoturismo, al crear recorridos por sus cenotes, lagunas y comidas típicas.
Por su parte, Quintana Roo tiene la Reserva de la Biósfera y Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam, zona en la que se encuentra Holbox (hoyo negro). Esta comunidad se dedica al ecoturismo y conservación de sus tierras y ecosistemas.
Gracias a que se encuentra entre el mar Caribe y el Golfo de México, esta isla tiene una fauna marina abundante y es sitio de migración para diferentes aves, por lo que el avistamiento forma parte de los atractivos y actividades realizadas en la isla. Sitios como Yalahau, un ojo de agua con desembocadura al mar, hacen de Holbox un atractivo sustentable.
El cambio de turismo tradicional a un turismo amigable con el planeta es un reto para el país, sin embargo las cualidades que posee facilitan la transición, ayudan a revivir la economía de comunidades y mejoran la calidad de vida de la población.
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