El Four Seasons Golf Club cuenta con dos campos, amigables para los jugadores aficionados, pero también tiene un grado muy atractivo de dificultad para quienes le siguen los pasos a Tiger Woods. Catorce de sus hoyos tienen vista al mar, ya sea al Océano Pacífico o la propia Bahía de Banderas. Pero el que es un espectáculo aparte es el 3B ubicado ¡sobre un islote!

7:45 RUMBO AL CAMPO

Amanecí en paz un sábado en Punta Mita. Estaba listo para irme al club de golf. Me sugirieron tomar previamente un desayuno tipo continental para sentirme más ligero durante el juego. La mayoría de los hoteles en Punta Mita tienen transporte gratuito al campo, y el traslado es de sólo quince minutos.

8:00 CLUB DE GOLF PUNTA MITA

Tuve la opción de elegir entre dos campos, cada uno de 18 hoyos: El Pacífico y El Bahía (green fee aprox. desde 150 dls.), diseñados por Jack Nicklaus. Han sido considerados por los especialistas como dos de los 50 más bellos del mundo. En el Pacífico, ocho de sus hoyos bordean el océano. En el Bahía, seis hoyos colindan con el mar, y a diferencia del Pacífico su fairway no tiene un pasto tan corto, es más alto y ondulado.

8:15 EL PACÍFICO

Me decidí por el Bahía, exclusivamente por su hoyo 3B. Después de conseguir un par y un Bogey en los dos primeros hoyos, tuve frente a mí la posibilidad, como en ningún field del mundo, de jugar dos hoyos número 3, el A y el B. El primero es relativamente sencillo, pero el segundo es el más hermoso que he visto y jugado en mi vida.

Y es que el 3B es un par 3, de 184 yardas, con una “pequeña” característica que hasta hoy lo hace único: el green está en una pequeña isla natural que – vista desde el aire – tiene forma de una cola de ballena. Se me cortó la respiración por unos segundos; el reto de juego y el espectáculo natural resultaban apasionantes.
Me concentré lo más posible; la brisa era leve, así que opté por mi fierro 5 para cruzar “ese pedazo del Pacífico”, pero como truco de magia, como si el océano la reclamara, la bola cayó a unas 15 yardas a izquierda del islote. Como la establece el reglamento -se me marcó un golpe de castigo- pero tuve una exitosa segunda oportunidad… logré cruzar el mar y quedó mi bola muy cerca del hoyo.